A raiz de un comentario de Claude en el post anterior q hablaba de la poca presencia (bloguísticamente hablando) de mimarido por estos lares, me he puesto a pensar en el por qué
En realidad, vivo pensando en "ese por qué" y en otros por qués, como por ejemplo por qué se me da por pensar en otro tipo cuando no hace ni 4 años q estoy casada (habiéndome casado enamorada y luego de haber recorrido un camino que me hizo estar segura de esa decisión) Aclaro esto último porque, no me jodan, no es lo mismo casarte a los 15 con tu primer novio que a los veintilargos despuès de haber conocido (tanto sexual como cotidianamente) a otros hombres
Y estoy llegando a la conclusión de que es esa cotidianeidad lo que, si bien no mata al amor, lo caga bien a palos.
No tenemos discusiones por plata, ni por mi familia ni la de él, ni por motivos políticos, reliogiosos y otras idealidades varias. En la cama nos llevamos relativamente bien (ese relativamente será explicado mas adelante) No me metió los cuernos (que yo sepa) y ni yo a él (que él sepa, jejeje, no en serio... mandarme un mensaje por mesenger me genera un conflicto con mi psiquis que no quiero ni pensar en que chispaso neuronal ocasionaría la mano de otro tipo en una teta mía)
Entonces, todo es un círculo de desgaste. Es mi espíritu libriano que busca justicia en todo.
Mi problema es que trato de "cumplir" en todo. Me hago cargo de todo, pero negro... dame una mano (o las gracias) de vez en cuando...
Desde que me levanto a que me acuesto es una maratón de hacer cosas porque "tengo que"... trato de no pensar al fin del día, de la semana o del mes la cantidad de horas que dediqué en hacer algo porque "quería" o "deseaba", porque calculo que me deprimo o me voy al carajo.
A modo de ejemplo: En la media hora / cuarenta minutos que me lleva levantarme y salir de mi casa, preparo desayuno x 3, almuerzo para la mini, junto juguetes y papeles que aparecen màgicamente durante la noche (porque junto todo antes de irme a dormir, lo juro) pongo (pràcticamente todos los dias) una carga en el lavarropas (que la chica que cuida a mi nena colgará y con suerte planchará, gracias a Dios) junto y lavo todo lo que quedó del desayuno... entretengo y consuelo a mi nena que si se despierta antes que me vaya, tengo super sketch... ah... y claro, también me baño, me cambio, peino maquillo y perfumo antes de salir
Que hace el personaje del título? Se baña, se cambia, desayuna y se para al lado de la puerta diciendo si me falta mucho...
De ahí me voy a un laburo que no me satisface y busco agujeros donde poder hacer cosas para mi profesión particular, o hasta hacer compras varias. Tengo horario fijo de salida (a pesar de mi jefe que mira en forma desaprobadora el reloj cuando salgo a los saltos como Pedro Picapiedras tras el Daba daba duu) y me voy corriendo a casa, para tomar la posta de la niñera (porque ensima soy buena empleadora y no la cago con el horario) y ahi hago algo por la casa y por mi niña, y cuando me acuerdo ya estoy preparando la cena y bla bla bla... son las 12pm y me desmayo tratando de subir a la cama. Ahi es donde viene el "relativamente" sexual de mas arriba, porque entre el cansancio, y la bronca que me genera el pulgar cansado de mi marido (cansado de hacer zapping) el encuentro que seguramente será bueno, "seguramente" no se va a dar...
Lo planteé? Si, varias, cientos de veces... Con la seriedad necesaria? Obviamente no.
Será posible que sea necesario un ultimatum? Además, si me ve mal, desgastada, cansada, horriblemente podrida de la vida, tiene que esperar a que estalle?
Es eso lo que le recrimino... si yo veo que llega cansado del laburo, le filtro a la nena, lo dejo descansar... la baño yo, la entretengo, me voy a dar una vuelta... todo para que tenga sus 5 minutos que lo ayuden a centrarse de nuevo... por qué no puede hacerlo él?
Colaboración pido. Empatía pido. Que son formas de amor. Y pido que lo vea, que sienta hacerlo. No me sirve que lave los platos porque yo me levanté de la mesa y me fui a dormir y no le quedó otra opción...
Ahora tengo que lograr que lo vea, y que lo entienda... y que cambie su accionar en consecuencia, porque sino cualquier gil, con un verso armado que me endulce el oido, va a lograr que cambie de domicilio postal